Nueva entrada en este curioso cuaderno de abordo de una escritora en apuros. (Ahora que lo pienso, podría ser un gran nombre para esta sección, pero bueno, lo dejaré para otro momento). Como ya sabéis, estoy poniendo sobre el papel todas aquellas inquietudes que me surgen en el proceso creativo de escribir mi historia y que quiero compartir con vosotros.
Hoy vengo a realizar una confesión. ¿Por qué? Porque os lo merecéis y porque quiero que sepáis hasta dónde llega mi locura personal. Lo confieso: Hablo sola. Si. Sí. Ya sé que vuestra cara ha cambiado y que ahora estáis pensando que Little Red está loca pero por favor, dadme tres minutos y trataré de explicarme.
Soy una persona muy auditiva. Puedo ver una película o una serie y voy a recordar muchos de los diálogos aunque solo la haya visto una vez. ¿Por qué? Pues porque mi cerebro funciona así. Cuando estoy escribiendo me gusta ponerme en la piel de los personajes. Y cuando digo ponerme en la piel quiero decir representar incluso escenas. No sería extraño si me encontrases en una cafetería levantando los brazos en alto o simulando un arco, o puede, si tienes suerte, con una mano delante de la cara para definir hacia dónde va la sombra cuando es media tarde. Intento otorgar realismo a mis narraciones y para ello, creo que es vital que represente algunas cosas para que queden lo más detalladas y realistas posibles.
Pero no siempre escribo fuera de casa, para mi desgracia, la vida a veces me encierra en mi dormitorio y aunque nadie de mi casa lo sabe, en ocasiones leo los diálogos en voz alta y trató de ver qué es lo que iría después. Se que suena bastante raro pero pongo voces para cada personaje e intento recrear las escenas entre ellos con el fin de saber si tiene fluidez y naturalidad esa conversación. En mi caso, tan importantes son los monólogos internos como las conversaciones que se mantienen. Eso sí, ser varias personas al mismo tiempo me está trastornado, sobre todo, si tenemos en cuenta que son personajes tan sumamente opuestos que ser uno de ellos me desquicia un poco. Pero esa es lo mejor de ser escritor: ser capaz de imaginar a una persona tan opuesta a ti que suponga un reto para tu mente el ser capaz de retratarla con fidelidad.
Por supuesto, cuando estoy en un sitio público intento controlar este tipo de conversaciones paralelas que se producen entre mis personajes para que las personas que me rodean no se sientan incómodas o que están compartiendo mesa con una persona... Extraña. Pero nadie dijo que ser escritor tuviera emparejada la palabra "cordura".
Tranquila y... ¡únete al club! Durante la primera revisión de #LSR, mi compañera Geo Costa y yo, nos leíamos los diálogos de LSR en cafeterías, terrazas, bares... poniendo voces, claro, para que sonaran lo más auténticos posibles y, bueno, supongo que nuestra foto tiene que estar ya en alguna comisaría con el epígrafe de "sujetos peligrosos". Todavía no han venido a buscarnos así que tranquila.
ResponderEliminarYo, sin embargo, opino como tú. Escribo mucho de oido. No sólo los diálogos, sino también por ritmo narrativo así que opino que muchas veces el sentido del oido se utiliza en la escritura mucho menos de lo que se debería.
¡Ánimo y adelante!
Yo también hablo solo, en especial cuando te inventas historias o como dices: Cuando leo una novela o veo una película. Yo me imagino finales alternativos o escenas que yo habría cambiado de ser el autor
ResponderEliminarMe encanta esta sección, la verdad es que yo también hago gestos y hablo sola cuando estoy creando una escena, así que supongo que no estás loca, o que en su caso lo estamos las dos jajajaj
ResponderEliminarBesos
Nos leemos
¿Quién acaso no lo hace? Yo, por mi parte, crería rarito al que no lo hiciera... JAJAJA, en especial a la hora de inspiración total, hablar sola es algo como normal cuando escribes o así lo veo yo. Incluso hay veces que tengo que recrear el movimiento de mi cabeza para poder desbribirlo, jeje... Bueno, si tu estás loca, imagínate todos los demás, jajaja...
ResponderEliminarBesos y saludos.
Hola!
ResponderEliminarYo hablo sola todo el tiempo y no precisamente cuando escribo, así que tranquila. Recuerda que siempre hay alguien más loco que vos jajaja.
De todas maneras me parece una técnica muy buena leer los diálogos y lo que escribes en general. Muchas veces al escucharlo descubrís errores que de otra manera pasarías de largo.
En fin, segui hablando en voz alta si es lo que te funciona, la cordura esta sobrevalorada.
Saludos, Cati-
Pues mira: uno de mis mentores me dijo una vez que corrigiera siempre en viz alta porque es como mejor se ven los errores, así que tan loca no estàs 😜. Fue un buen consejo: funciona.
ResponderEliminarPuees...creo que es una buena idea, la verdad. Nunca se me habría ocurrido aplicarlo a la escritura,, pero creo que recrear escenas para ver si la conversación fluye es una forma muy rápida y efectiva para ver si la escena fluye.
ResponderEliminarY tranquila, con tanta teconología móvil por el mundo, hay cosas mucho más raras. Al fin y al cabo, ya es normal ver a gente grabarse con cámara y micrófono por la calle.
Un saludo
Pues yo no solo lo veo raro, sino que me parece que me acabas de dar una idea estupenda. Lo que me da mogollón de envidia es la gente que, como tú, es capaz de escribir en lugares públicos. Yo no soy capaz de escribir ni la lista de la compra si me están mirando.
ResponderEliminarUn besote.
Madre mía... me encanta esta sección
ResponderEliminarGracias por compartirlo con nosotros