Jody Gerhman nos trae Boy in Boyland una comedia juvenil en la que la mentes de los chicos es puesta a prueba por el ingenio de Natalia con un objetivo: descubrir cómo piensa el género masculino. 
Natalia se propone lo imposible: infiltrares en un instituto exclusivo para chicos para sacar información y poder escribir un artículo revelador sobre la verdadera mentalidad de los hombres.
Eso supone un gran cambio para Natalia. Ahora debe ser un chico. La transformación gracias a sus dos grandes amigas le lleva directa al corazón de ese instituto y a que nadie la reconozca.
Le tocara compartir habitación con un joven actor de obras de teatro con e que pronto establecerá una estrecha amistad. Natalia pasa de ser tremendamente ignorada a famosa de la noche a la mañana por una pequeña equivocación. La cual, le dará pase VIP a los pensamientos masculinos.
Pronto Natalia comenzara a sentir cosas por s compañero de habitación y amigo,pero entre ellos hay un gran problema, ella es un "chico" y ella le está mintiendo.
Esta novela ha sido entretenida y ha dado lugar a situaciones divertidas. Aunque la verdad es que me ha recordado bastante a una película de Amanda Bynes, "Ella es el chico". Se cambia el fútbol por el teatro.La historia aborda las típicas problemáticas juveniles: las relaciones con los padres, los amigos, las relaciones de pareja. Los primeros amores, las presiones de un instituto y sobretodo... Los enemigos del instituto.
Estas se tocan de manera muy superficial y apenas se profundiza n ninguna de ellas.
Salvó los toques de humor, la obra es normalilla, más bien escasa y predecible.
El final es muy precipitado. Pienso que se podía haber alargado o desarrollado de otra forma, dando lugar a un mejor desenlace para los protagonistas.
2/5
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